samedi 8 décembre 2012

acid sex


Fuckin acid
Scratch me, 
goosebumps
why am i here?
I was fucking
And then what happened?
What the hell happened!?
Fuck it
Fuck you
Fuck me.

lundi 16 janvier 2012

* Black Satin Sheets

Mi piel se erizaba, la sensación de las sábanas negras era casi un soplido. El terreno oscuro y suave de la cama se prestaba para batallas épicas. Yo gateaba hacia ella, lo hacía lento, sintiendo  cada centímetro cuadrado de tela, cada roce me hacía anticipar lo que más quería: sentirla contra mi piel.

Me sentía como una gata rodeando una paloma, la miraba con ojos hambrientos, miraba sus curvas, sus pezones, sus ojos, ella quería que la devoraran pero se limitaba a decírmelo con la mirada. Tenía las piernas ligeramente separadas y la postura totalmente relajada, su hambre tácita era inquietante, te invitaba a acercarte, y como una planta carnívora, prometía no dejarte ir.

mientras tanto el soundtrack en el fondo cantaba:
i do not struggle in your web, because it was my aim to get caught...

Me acerqué a sus pies, mi instinto me ganó y me encontré lamiendo sus dedos. Mi lado racional perdió todo poder sobre mi, todo lo que había planeado hacer desapareció de mi mente. Una sensación de libertad animal me inundó y no volví a pensar sino solo me dejé llevar por el efecto que ella tenía sobre mi.

Tocaba sus piernas, las acariciaba hasta los muslos, logré entender a todos los hombres que conocía pues entendí lo que es sentirse emborrachado por un aroma, sentí lo que es estar atrapado por una mujer.

Cada vez que la sentía hacer un sonido de placer, me latía la entrepierna, yo solo ajustaba las piernas, cerraba los ojos y sentía su aroma. Mis manos recorrían sus piernas lentamente, ella me miraba expectante y ansiosa pero yo pensaba tomarme mi tiempo, para ella necesitaba todo el tiempo del mundo.

Separé sus piernas un poco más, mis manos recorrían sus muslos y el contorno de sus caderas, en el recorrido un dedo curioso rozaba su humedad y calor. Sentía como si me hubiera podido meter de cabeza ahí. Sus nalgas eran perfectas, suaves y carnosas, no soporté más y empecé a besarlas, cada beso era delicioso y mi lengua recorría sus curvas deliciosamente.

Le besé las caderas, las tomé con mis dos manos y volvieron los temblores en mi zona baja. Esta vez sentía mi propia humedad calentándome, al ajustar las piernas sentía la presión resbalosa allá abajo. Me sentía como en plena transformación animal. No podía pensar, mis ojos no funcionaban, me dolía el espacio entre ella y yo. Enredé sus piernas alrededor mio y mi lengua hizo un recorrido lento y delicioso desde su cadera hasta sus muslos.

Abrí sus piernas aun mas, y la vi en todo su esplendor, acerqué mi cara y la olí.


El aroma era embriagante, era lo único que quería, lo único que necesitaba. Acerqué mi lengua y la probé. Largo, fuerte y lento.

You can have my isolation
You can have the hate that it brings
You can have my absence of faith
You can have my everything

Sentir su sabor en mi boca me excitó aun más, jamás había sentido algo así. Estaba mucho más allá de lo que conocía. Me separé y la miré mientras mis manos recorrían su cintura hacia sus senos. Sus pezones estaban duros. La besé duro en la boca mientras le apretaba las tetas, se sentía tan delicioso, tan suave en las manos, tan rico en el beso, tan húmedo abajo. Cuando inventaron la palabra placer estaban pensando en esto, estoy segura.

Baje por su cuello, la mordí. Le dolió pero no me dijo nada, mis manos se pusieron un poco más agresivas. Lamí sus hombros, brazos, clavícula, iba lentísimo porque quería llamerla completa y quería recordarlo todo.

Estaba frente a sus tetas, le besé las costillas y fui subiendo alrededor, como escalando. Las mordía suavemente y veía como su cara hacía un gesto de dolor pero enseguida sonreía. La amé, quería poder tenerla así siempre.

Llegué a sus pezones y los lamí con la punta de mi lengua, alrededor y con frenesí. La mordisqué un poco, le gustaba, podía ver una sonrisa perversa en su cara.

I Will not oblige you, you'll remember me like a melody, Yeah, I'll haunt the World inside you

Ella se me abalanzó y me beso duro en la boca, rodamos en la cama gigante y sentí su cuerpo completo contra el mio, nos reíamos y nos besábamos, la mordía y la apretaba contra mi siguiendo su juego hasta que la tuve echada encima.

Mis manos recorrían su espalda, su cintura, su trasero. Me ahogó una sensación de querer romperla en mil pedazos. Ella besaba mi cuello mientras yo gemía a voz en cuello, tenía una de sus manos en mi cara y con la otra acariciaba mis tetas.

Se volvió a echar sobre mi pero esta vez se apretó contra mi muslo y metió el suyo entre los mios. Inmediatamente sentí su humedad contra mi, era una sensación espectacular, y sentir su muslo en mi, la presión, el calor, la humedad, cada uno de sus movimientos me elevaba más.

Algo dentro mio latía con fuerza, mis oídos empezaron a taparse, mi existencia se resumía a los puntos de mi piel que tocaban los de ella,rodé con ella una vez más, la quería debajo. Subí el movimiento a algo mas fuerte casi penetrante. Sentirla debajo mio me subía el espíritu, mi instinto alfa se alimentaba con solo verla ahí, rendida ante mi.


Enterré mi cara en su cuello, apreté mis caderas contra las de ella, sentí mi sexo mojado rozar sus piernas.

Calor. Calor  Resbaloso. ella. Olor. Subí rápido.

Ella soltó un grito y en ese momento mi cuerpo explotó.

piel con piel, calor con calor, sexo con sexo.

Cuando volví a mi, la encontré lamiento mis muslos. Tenía los dedos dentro mio, era delicioso sentir los latidos post orgasmo con sus dedos ahí adentro. Sus dedos era curiosos, me besaba mientras frotaba mis pezones con sus dedos humedos, luego me los lamia.

Sentí el temblor otra vez, la tome agresivamente, no me importaba si le doliese o no, es más, quería que le duela, quería dolerle. Le di la vuelta, le mordí la espalda, la senté en mis piernas y empecé a morderla toda, esta vez sin contenerme.

This has just begun because we haven’t even gotten started yet
I haven’t even tied you up
I haven’t even turned you over
this is where I want to live right here between your hips
Where all the love you hold and hide is, right here between your hips this is where I want to live
Its where all the love you give exists

La marqué por todos lados, tenía los dedos de mi mano derecha dentro de ella, allá abajo, en ese eden humedo, jugueteaba con sus labios, sentia su clitoris entre mis dedos.
Mordia su espalda y con la otra mano tomaba una de sus tetas.

Cuando ya no pude mas la empuje a las sabanas, ella no dijo nada, estaba dispuesta, se me entregaba sin miramientos, solo me sonreía cada vez que me miraba a los ojos. Le abrí las piernas, le mordí los muslos, podía ver las marcas moradas en sus piernas. Luego me hundí en su calor.

Mi lengua la recorría toda, esta vez con hambre voraz. Sentía su clítoris en la punta de mi lengua, recorría los bordes, mordisqueaba los labios, los jalaba y los lamia como jugando. Hundía mi lengua dentro de ella, me hubiera gustado tener una lengua mucho mas larga para entrar mas profundo. Se sentía tan bien que no quería salir de ahí.

Empecé a lamerla como a un helado, de abajo a arriba, con ritmo. El arete de mi lengua la hacia temblar un poco. metí un dedo en su culo y empecé lo bueno.

arete, clitoris, lengua, ritmo.

Oh, no, oh, there I go again I need a spanking, 'cause I've been bad
So let my body do the talkin' I'll slip you that hot, sweet, sexy loving

Mi mano en su cadera sentía sus movimientos, cada vez mas rápidos, mas necesitados, mas desesperados. Se apretaba contra mi boca, acariciaba mi cabeza, enredaba sus dedos en mi pelo, me jalaba contra ella, mi lengua se movía rápido, sentía con mi otro dedo como se contraía y luego se relajaba, el movimiento se hizo mas rápido, la senti explotar, soltó un grito delicioso. Se estiró como gata y tomó mi cabeza con sus dos manos, me jaló hacia su boca. Me beso, se besó, sentía que quería recolectar su propio sabor de mi boca.

Your mouth waters stretched out on my bed your fingers are trembling and your heart is heavy and red your head is bent back your back is arched my hand is under there holding you up

Quedé ahí, agotada y embriagada. Me dormí enredada en sus piernas...

samedi 19 novembre 2011

.



me tomó del pelo y me acercó a su cara
podía ver como la ira se acumulaba dentro de él
pero no le tuve miedo sino expectativa...

me tomó de la cadera tan fuerte que aun tengo las marcas de sus dedos
me acercó a la suya y lo sentí. Fuerte, grande y poderoso.
Sucumbí. 

mercredi 5 octobre 2011

.

Need you
Dream you
Find you
Taste you
Fuck you
Use you
Scar you
Break you
Lose me
Hate me
Smash me
Erase me
Kill me


samedi 27 août 2011

the smell of your neck, the warmth of your breath, the sweetness of your taste, the power of your touch, the strength of your need, FUCK!

Todo parecia decir que no iba a pasar nada. Ella ya se estaba resignando a la idea y se había empezado a dedicar al pisco. Bailaba al ritmo de la música con ojos cerrados, daba vueltas y se movía para así sacarse de encima esa necesidad tan animal que sentía hacia él. Lo veía desde lejos, ahí, y también sentía como él la miraba discretamente mientras bailaba. 

No lo pudo soportar más, fue a la barra y pidio otro vaso. Había pasado ya tantas veces por ahí que el barman ya sabía que prepararle. Solo intercambiaban miradas de comprensión y se decían salud. Ella siguió su camino, tenía que salir, aire. Caminó hasta pasar una piscina y entrar por unas enredaderas, ya sentía dentro esa melancolía otra vez. Sacó la pipa y la prendió. Mejor, pero había que volver a la fiesta, con todos, a seguir fingiendo.

- Estuve intentándolo pero no puedo - escuchó desde la oscuridad. El corazón se le detuvo, como siempre al sentirlo cerca. 
- ¿No puedes que? - contestó.
- Controlarlo. 
Ella se volteó y lo vio directamente a los ojos. Ahí fue cuando ella supo que toda esa fuerza que había estado reuniendo para poder decirle que no, había sido por gusto. Le tembló el pecho.
- Entonces no lo hagas - le contestó.

No tuvieron que decir ninguna otra palabra. Manos en las caderas, lenguas deseosas y aliento agitado y caliente en el cuello. 

Sus ojos se cruzaban y se miraban mientras se besaban y se tocaban el cuerpo. Él ya la tenía contra la pared, explorando sus piernas, arañando sus muslos tratando de aguantar las ganas de destrozarla. Le levantó el vestido. La lamió suavemente mientras la miraba a los ojos. Amaba ver como ella cerraba los ojos de placer con cada movimiento de su lengua. Metió sus dedos en ella y volvió a sentir esa humedad que lo volvía animal. Sus dedos empezaron a moverse con una velocidad loca, él estaba sumido en tanto éxtasis que las sensaciones los habían entumecido. Ella lo vio. Lentamente bajó hasta donde estaba él, le dio un profundo beso y al sentir su propio sexo entre sus labios se excitó aún más. 

Ella busco su miembro inmediatamente, no podía aguantar más las ganas de tenerlo entre sus labios. Firme, listo. Lo tomó entre sus manos mientras lamía  y mordisqueaba la punta. Usaba su arete, sabía que a él le gustaba. Veía en sus ojos que disfrutaba cada mordida pero la necesidad apareció y tuvo que dejar la lentitud para su imaginación. Tenerlo todo dentro de la boca era delicioso, lamerlo locamente era un movimiento repetitivo que anticipaba lo que más ansiaba. Sus manos estaban ya en su culo. El tomó su cabeza y la ayudó a conseguir un ritmo delicioso. Ella sentía como sus nalgas se contraían cada vez que el le penetraba la boca, tenía ganas de explotar, las sensaciones y la anticipación la hacían sentir algo dentro que pensó la mataría en el acto.

Sus ojos se cruzaron otra vez y así, automáticamente, supieron que ella quería tenerlo dentro y él queria estar dentro de ella. Se besaron apretadamente mientras sus sexos se buscaban. Los olores se mezclaban, boca, lengua, sexo, las necesidades, lo sentimientos. Su pene sintió ese calor que solo ella le daba y sintió como poco a poco ella lo invitaba a entrar.

 Una vez dentro se acabaron las pleitesías. El poder de sus caderas - la una contra la otra - delataban esa apuro de quererlo todo y quererlo ya. El tenía una pierna de ella subida contra la pared y la fuerza que él ejercía sobre ella la tenían sumida en un estupor sexual delicioso. En su realidad inmediata solo existían sus manos agarrándola  fuertemente, sus ojos desnudándola por completo y el placer que se daban el uno al otro.

Ella lo abrazó con sus dos piernas, él la cargó y la apoyó contra la pared. Cada estocada era un paso más hacia el clímax, se abrazaron más fuertemente. Las dos caderas se fundieron en un sólo movimiento rítmico sorprendente. La fuerza, el calor en el cuello, los gemidos, las mordidas, lamidas. Sus existencias estaban resumidas en el punto donde sus cuerpos se volvían uno, donde violaban todo lo que los mantenía separados, el calor, la humedad, la textura, una estocada fuerte, con tanta fuerza como para penetrar hasta al alma, palpitaciones, orgasmo.

Los cuerpos ya no tenían fuerza, se habían sumido tanto el uno en el otro que habían olvidado de la torpeza de sus cuerpos al estar separados. Cayeron rendidos al piso. El aún dentro de ella, ella sentada sobre él. 

Se besaron tiernamente, se miraron, se acariciaron las caras y se lamieron las heridas. Luego se separaron tan lentamente que era evidente que querían sentirse el uno al otro hasta el último momento posible. Se miraron otra vez y se rieron tímidamente. Eran cómplices y esto era lo mejor que sabían hacer juntos. 

Prendieron la pipa, no hablaban, no lo necesitaban. Los besos decían más. El humo disipó lo insulso de volver a la realidad. Se besaron fuertemente una vez más. Luego volvieron a la fiesta. 

Él con su novia y Ella con el suyo.



lundi 22 août 2011

dimanche 24 juillet 2011

::


Chastity:  The most unnatural of the sexual perversions.  ~Aldous Huxley

vendredi 22 juillet 2011

*

If you were my homework i'd do you

everyday in every possible way.


vendredi 15 juillet 2011

::



but as much as she wanted him
and he wanted her
she wasn´t near
and he wasn´t there...



mercredi 29 juin 2011

*

totally unexpected
came from behind
a strong grip on mi hip
a virile pull towards him
hot breath on my neck
i know what´s to come
and i love it.

samedi 11 juin 2011

jeudi 9 juin 2011

*


my man leaves
far far away from me
oh the things i do!

fun for me
fun for you
screw me
and i´ll screw you

feel my tits
if you may
eat a cookie
eat a big dick everyday

soft porn

soft touch from his fingertips
skin arises in acute expectation
sighs turn to extreme respiration
and need explodes in fruitful ejaculation

dimanche 5 juin 2011

Fuego & Vino


La puerta se abrió estrepitosamente, pero eso no fue problema, ella estuvo esperando ese golpe de desde hace rato. Él no ha tenido un buen día así que la tarea ahora es lograr todo lo contrario durante la noche.

Su cabeza estaba a mil, los ensayos y el trabajo lo tenían cansado, no había tenido tiempo si quiera de escuchar un buen disco o de comer con tranquilidad desde hace varios días. Tenía todo reprimido dentro del cuerpo, necesitaba un desfogue urgente.

Ella, todo lo contrario a él, había estado esperándolo en un estado tranquilidad y relajación como de leona esperando la llegada de su rey. Ni siquiera se movió al escuchar la puerta, estaba tan bien ahí, echada sobre esa alfombra peluda que tan bien acariciaba su piel, que ni la anticipación acumulada la hizo moverse.

Él entró de frente a la cocina, estaba tan concentrado en sus problemas que ni se dio cuenta que todas las luces de la casa estaban apagadas, excepto una, la de la chimenea. Algo dentro de él tuvo un buen presentimiento…

Ella estaba ahí, escuchando un disco de jazz suave que se fundía con el crepitar de los maderos en el fuego, no se movía, no estaba apurada. Sabía que tenía toda la noche solo para él.

Él se acercó lentamente, sabía que lo estaban esperando. La vio allí echada sobre la alfombra, solo tenía puesto ese calzón que tanto le gustaba y un pequeño polo, tan suave y delgado, que dejaba ver sus pezones ávidos de sus labios.

Ella abrió los ojos y le sonrió, en ese momento él se olvidó de todo lo que había pasado durante el día, nada tenía más importancia que estar ahí, ahora. Estiró su mano ofreciéndole una copa de vino y lo invitó a sentarse con ella.

Él la besó, un beso tan fuerte e intenso que la hizo temblar, le hizo perder el control por un momento. Sus besos eran así, ella sabía que nunca podría resistirse a él, nunca. Empezó a desvestirlo, a los pies del fuego la ropa estorbaba. Ella disfrutaba con cada prenda que le sacaba, era como abrir los regalos en navidad. La sensación de anticipación era deliciosa.

Ella quería complacerlo, quería hacerlo feliz, quería relajarlo. Se sentó en su espalda y empezó a masajearla con aceites. La sensación de su espalda fuerte y de sus vellos era exquisita, sentir su cuerpo bajo al suyo la excitaba. No podía evitar mover todo el cuerpo, ya no solo usaba sus manos, todo su cuerpo sentía una necesidad urgente de fundirse con el de él, era incontrolable.

Él estaba sometido a ella, se estaba aguantando las ganas de poseerla violentamente en ese momento. Sabía que si iba con paciencia todo iba a ser mejor. Se excitaba al sentir las manos resbalosas ir por todo su cuerpo, relajando cada centímetro de su piel, especialmente cuando pasaban por sus nalgas. Él sabía que ella amaba esa parte de su cuerpo. Necesitaba más vino. Cuando se sentó para servirse, la vio a la luz del fuego, se acerco a ella y rozó sus pezones. Sintió que algo dentro suyo perdía el control, le saco el polo y la echó. Le hecho vino encima y empezó a beber de ella. Nunca el vino supo mejor, sentir el sabor en sus pezones duros era muy excitante. Sentir como contoneaba las piernas a su toque lo volvía loco. Bebió el vino de cada centímetro de su cuerpo, besó sus piernas de principio a fin, la hizo temblar.

Ella estaba tan subida en éxtasis que quiso compartirlo, tomó su copa y derramó vino sobre el pecho de él, lo lamió y le mordió las tetillas con una voracidad increíble. Luego bajó hasta su miembro, que ya la estaba esperando. Echó un poco de vino sobre la punta y le escuchó un gemido de pura anticipación. Empezó a lamerlo lentamente, desde la base hasta la punta como si fuera un helado, mordisqueaba la punta y jugaba con su arete de la lengua. Nunca había probado tan buen vino.

Él empezó a moverse, el movimiento de sus caderas delataba su necesidad. Ella tomó una posición mas cómoda para permitirle, a él, libre movimiento. Él sostenía su cabeza y penetraba su boca con urgencia loca, profundamente y sin refrenarse, sabía que ella estaba lista para él. Ella tan solo lo miraba desde abajo, sus ojos decían mucho, ella lo quería todo y él se lo daría.

Ella manejaba sus manos de una manera exquisita, como si supiera donde era que él quería ser tocado. Una mano en su pecho, una posición que lo hacía sentir poderoso y la otra rozándole los testículos, apretando suavemente siguiendo el compas del movimiento de su cadera. El momento era perfecto, la sensación increíble y ahí se dejó llevar por las sensaciones y llegó al orgasmo en sus labios.

Él necesitaba probarla, sabía que el húmedo calor lo estaba esperando. Empezó a explorarla con sus dedos. La sensación de humedad era deliciosa, como acariciar seda y terciopelo. Empezó a penetrarla con sus dedos con mucha fuerza mientras besaba y mordía sus pezones. La escuchaba gemir y eso lo excitaba aun más. La volteó y empezó a morderle la espalda mientras seguía jugando con sus dedos, rozaba su clítoris y la sentía temblar. La tentaba, la volvía loca, él sabía el poder que tenia sobre ella. Con la emoción de las mordidas sus dedos se atrevieron a ir un poco más allá. La visión que tenia él era irresistible, su espalda suave y su trasero contoneándose, aprovechando su humedad empezó a introducir su dedo en ese suave trasero, sintió como se contrajo y luego se relajó invitándolo a entrar. Acercó sus labios y la probó, la devoró.

Ella ya no podía más lo necesita con una angustia animal, necesitaba sentirlo dentro y se lo hizo saber. Él sabía qué hacer, primero la penetro por delante, con fuerza, con urgencia, sabiendo que ella esperaba algo diferente y sabiendo que al hacerla esperar incrementaba su excitación a niveles increíbles. Ella gemía fuertemente con cada estocada suya, se sostenía de los glúteos de él para ayudarlo a penetrarla más profundamente. En un momento de éxtasis empezó a acariciar su ano y se dio cuenta que cada vez que lo tocaba el movimiento de sus caderas contra ella se hacían más fuertes, era buena señal. Suavemente empezó a introducir su dedo en él, sabía que lo estaba disfrutando pues sentía como poco a poco se iba relajando y permitía que su dedo entre más allá. Sus manos lo tenían, una en uno de sus glúteos clavándole las uñas como águila ávida de su presa y la otra mano explorándolo a profundidad. La sensación de poder la sumergía en el más grande y delicioso trance sensual de su vida. La fuerza con la que la penetraba era la mejor demostración de cuanto la deseaba, y eso la hacía sentir bien.

Él no podía ni hablar, las palabras las dejaron atrás hace mucho rato. Estaba tan excitado que no existía otra realidad más que ella. Su calor, su manera de tocarlo, su olor, lo sumergía en un trance del que no quería despertar nunca. De pronto sintió un impulso animal que se aproximaba, la tomo del pelo fuertemente y se acercó a sus oídos – Eres mía- le dijo – y la besó mientras la volteaba otra vez. Le mordía el cuello mientras le decía que era suya. Ella no decía nada, no tenía porqué, estaba completamente a su merced y él lo sabía. Él se puso detrás de ella, su boca detrás de su cuello para que ella pudiera sentir el calor de su respiración, eso hacía que se le erice la piel como a gata en celo.

Ella sintió como la penetraba por detrás, entraba lentamente sintiendo cada palpitar de su cuerpo. La sensación era fantástica, lo gemidos eran música. Él y ella sumergidos en sensaciones casi tántricas. Los gemidos aumentaban con la fuerza de cada penetración, los cuerpos intentaban volverse uno con una necesidad incalculable.

Ella estaba hecha para él y él para ella.

Él la poseía, la tenía, era suya, la marcaba con cada penetración. Ella estaba a punto de llegar a un orgasmo y le pidió que llegaran juntos. Él dejó de contenerse y empezó a darle con más fuerza y con más rapidez introduciendo poderosamente todo su ser en ella, ella gemía sumergida en placer. Cada impulso hacía que sea más difícil contenerse, y cuando ya no pudieron mas llegaron juntos a un orgasmo perfecto, los cuerpos estorbaban. La inercia hacia que se sigan moviendo el uno contra el otro pero ellos ya estaba completamente fuera de sí. Con las última fuerzas que tenían se besaron y cayeron rendidos al piso.

Él la tomó en sus brazos y le hizo sentir que ese era el lugar más seguro y perfecto del universo.

Ella se dejó ir en sus brazos mientras sentía como la acariciaba suavemente con esos dedos que la habían explorado tan deliciosamente.

Él se dejó ir con la sensación de su suave piel en los dedos y la imagen de su cuerpo desnudo frente al fuego.

tacit dominatriX

Una guitarra excitada. Una mujer eléctrica. Un solo de sexo.

'030' by The Good The Bad (UNCUT) from 030 on Vimeo.